Espectacular el cambio de la calle Fermín Lasuen, convertida en una calle pacificada, ganando espacio para el peatón, con velocidad limitada 20 km/h, sin tráfico de tránsito, salvo para los ciclistas a los que se les ha acondicionado sendos contrasentidos. Se empieza a ver cómo van a ser los interiores de las supermanzanas. Felicitaciones a los responsables que han apostado por ello y que se han mantenido firmes a pesar de las presiones en contra. Ese es el camino.